10.20.2009

Me dijo su nombre. No lo recuerdo. Me dijo que le gustaban los gatos hasta que se le murió el último. Ahora tiene perros. Se presentó como “vidente de los mejores poderes ocultos del universo”. No sé porqué pero le creí. Platicamos como quince minutos en los que me resumió todas sus desgracias, se confesó adolorida de vivir y me leyó la mano: “eres un muchacho afortunado pero tonto. ¿Qué haces tú en la calle hablando con mujeres locas? No te vas a morir pronto”. Me siento aliviado por haberla conocido. Es extraño.

8 comentarios:

Paco Puentes dijo...

¿Qué tal amigo?, abandonado tengo por mucho tiempo el mundo de los blogs, pero cada vez que regreso sigo aprendiendo de tus imágenes.
Eres Grande.
Un saludo y hablamos

Anónimo dijo...

también creo que sos afortunado,pero tonto.

Anónimo dijo...

y guapo... profe
(k)

Lidia Laflor dijo...

Siempre he admirado esa capacidad tuya para ser tan maleable. Te adaptas a toda circunstancia, caramba! No se diga más de tu capacidad para retratar de manera suprema las escenas de la vida cotidiana.

Gracias por ser los ojos de muchos.

todavia dijo...

A mi me gustaria que me leyera la mano esa señora. Imagino que la lectura seria muy similar, con la variante de que la fortuna no me sonrie demasiado.

Que encantadora historia.

Gabriel Cruz dijo...

Me ha encantado esta fotografía, la fuerza de las texturas y el contraste de las sombras y los brillos... A la señora no tengo el gusto de conocerla :(. Muy buena foto...

PAPRIKA dijo...

Afortunado pero tonto...

ja! que cosas dicen los que andan por las calles y les llaman locos.. mas cuerdos quizas que muchos.

Un Abrazo como siempre y mi cariño!

Isra Zamora dijo...

Una Historia rara, pero exitante!
Me agrada mucho ver la capacidad que has desarrollado, nunca dude de ti, sigue pa´delante que tienes mucho que recorrer!
Un abrazo enorme Primo!